Cambio al Horario de Invierno: Implicaciones y Debate en España
En la madrugada del próximo domingo, 26 de octubre, se llevará a cabo el cambio al horario de invierno en España. A las tres de la mañana, el reloj se retrasará una hora, volviendo a marcar las dos. Este ajuste horario, que se realiza dos veces al año, ha sido objeto de debate en el país.
Postura del Gobierno Español
El Gobierno de España ha manifestado su intención de eliminar estos cambios horarios, argumentando que el ahorro energético que se logra es mínimo y que, además, existen efectos adversos sobre la salud de la población. Esta postura se alinea con la creciente preocupación por el bienestar de los ciudadanos y la eficiencia energética.
Impacto en el Sector Agrícola
El cambio de hora también tiene repercusiones en el sector agrícola. Apag Extremadura Asaja, una organización agraria, se ha pronunciado en contra de los cambios horarios, abogando por mantener de manera permanente el horario de invierno. Según ellos, este horario está más sincronizado con el ciclo natural del día y la noche, en contraste con el horario de verano, que presenta un desfase de dos horas que impacta negativamente en las actividades agroganaderas.
Juan Metidieri, presidente de Apag Extremadura Asaja, ha destacado que ciertas labores agrícolas, como el ordeño, no se adaptan a los cambios de hora, lo que reduce el tiempo disponible para el trabajo y aumenta los costos operativos.
Por su parte, Herminio Íñiguez, presidente de la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Villanueva de la Serena (Agryga), ha expresado que el cambio horario interrumpe la rutina diaria, y ha mostrado su apoyo al horario de invierno.
En contraste, Ignacio Huertas de UPA-UCE ha señalado que, aunque el cambio de hora no afecta directamente a los agricultores, sí apoya la idea de establecer un horario fijo durante todo el año.
Propuesta a Nivel Europeo
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que España propondrá a la Unión Europea la eliminación del cambio de hora en todo el continente. Esta propuesta se basa en la opinión mayoritaria de los ciudadanos y en estudios científicos que indican que el cambio de hora no genera un ahorro energético significativo y puede alterar los ritmos biológicos de las personas.
Desde 1980, la UE ha coordinado los cambios de horario con el objetivo de optimizar el uso de la luz natural. Sin embargo, los avances sociales, tecnológicos y económicos han hecho que esta medida resulte obsoleta, afectando negativamente al bienestar de la población. La propuesta española busca que los Estados miembros consideren la evidencia científica y actualicen sus políticas acorde a las necesidades actuales.
La planificación de la UE sobre estos cambios concluye en 2026, lo que el Gobierno considera una oportunidad para poner fin a los ajustes horarios. Además, una consulta ciudadana realizada por la Comisión Europea, en la que participaron 4,6 millones de personas, reveló que el 84% de los encuestados está a favor de eliminar los cambios de hora.
Actualmente, la falta de consenso entre los Estados miembros ha detenido la implementación de esta decisión.




