Llerena volvió a convertirse el pasado sábado 10 de mayo en punto de encuentro entre naturaleza y ciudadanía con la celebración del II Festival del Cernícalo Primilla. Organizado por la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Llerena, el evento tiene como objetivo sensibilizar a la población sobre el valor ecológico de esta ave rapaz, además de resaltar el atractivo de contar con una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) en pleno casco urbano.
El cernícalo primilla, el más pequeño de los halcones europeos y actualmente en peligro de extinción, encuentra en Llerena un refugio natural, anidando en los huecos de edificios históricos como la iglesia de Nuestra Señora de la Granada o la iglesia de Santiago. Precisamente en estos enclaves se desarrolló una de las actividades principales del festival: una ruta guiada de observación de aves, durante la cual se contabilizaron 926 ejemplares de 17 especies diferentes.
El Director General de Sostenibilidad de la Junta de Extremadura, Germán Puebla, asistió a la jornada y destacó la singularidad del evento: “Es una oportunidad única para descubrir esta ave rapaz y para contemplarla en su hábitat natural, entre las torres y muros que forman parte del valioso patrimonio de Llerena”.
Puebla también subrayó la importancia de encontrar un equilibrio entre conservación y desarrollo: “Estamos trabajando para proteger especies amenazadas como el cernícalo primilla, pero sin dejar de fomentar el desarrollo económico y social de los territorios que las acogen”.
La celebración del festival no solo pone en valor la biodiversidad urbana de Llerena, sino que también refuerza su potencial como destino de turismo ornitológico, un nicho en auge que aúna sostenibilidad y dinamización local.