Actualización del Protocolo de Acoso Escolar en Extremadura

El protocolo vigente para abordar el acoso escolar en Extremadura se basa en un plan regional que define el maltrato a través de tres criterios simultáneos: intención de hacer daño, repetición de las conductas y desequilibrio de poder entre la víctima y el agresor. Este plan incluye un Protocolo de Intervención Rápida que ha servido de guía en los centros educativos de la región.

Estructura del Procedimiento

El procedimiento se organiza en tres fases principales: Detección, Observación y Análisis e Intervención. Cualquier miembro de la comunidad educativa puede comunicar una sospecha, incluso de forma anónima, lo que activa la fase de detección. Posteriormente, el equipo directivo se reúne con el tutor y el orientador para decidir si se inicia el procedimiento y se adoptan medidas preventivas.

Si el caso avanza, se forma un Equipo de Valoración compuesto por un directivo, un orientador, un educador social y un profesor. Este equipo lleva a cabo la fase de Observación y Análisis, recopilando información de todas las partes implicadas, preservando la intimidad de los menores y fomentando un clima de confianza.

Instrumentos de Evaluación

El protocolo incluye anexos con guías para las entrevistas. En el cuestionario dirigido a la supuesta víctima, se formulan preguntas como «¿Cómo te sientes cuando ocurre esto?» o «¿Qué haces cuando esto sucede?». La responsabilidad sobre el menor es tal que se le pregunta directamente «qué tendría que suceder para que se arreglase el problema».

En casos de ciberacoso, la guía de entrevista para la víctima plantea cuestiones como «¿Por qué crees que lo hacen?» o «¿Qué crees que podría hacer?» la persona que recibe los insultos. También se investigan las fuentes de la agresión, preguntando si se producen a través de «Móvil, Email, WhatsApp, Chat, YouTube o Facebook».

Iniciativas de la Junta de Extremadura

La Junta de Extremadura ha anunciado que está trabajando en la mejora del protocolo contra el acoso escolar, un problema que consideran de gran relevancia. La consejera de Educación ha declarado que el objetivo es la «desaparición total» de estos casos en los centros educativos de la región. «Mientras que haya un único caso, es mucho», afirmó.

Según la consejera, el departamento lleva «casi dos años» trabajando en este procedimiento. «Para nosotros no es nuevo», señaló, destacando la implicación de la secretaría general en el desarrollo del protocolo. Aunque se ha registrado una reducción en el número de casos en la comunidad autónoma, la consejería insiste: «no estamos satisfechos».

Datos y Colaboración

La consejera recordó que los datos del Observatorio de Convivencia se aprobaron en la primavera del año pasado, en una reunión a la que, según lamentó, «los sindicatos no se presentaron» a pesar de ser «un tema tan importante y tan sensible». Paralelamente, el gobierno regional está avanzando en la mejora de la Ley de Convivencia para reforzar las herramientas disponibles. «No nos vale solamente con que disminuya, tiene que desaparecer», concluyó.