El secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, ha contrapuesto el modelo de los socialistas que representa Pedro Sánchez de cara a su investidura como presidente del Gobierno, con el «diálogo» y la apuesta por la «convivencia», frente al de la «crispación y ruptura social en la calle» que representarán «las derechas en Barcelona».
Se trata de una «España integrada con todos los territorios en el mismo proyecto», lo cual defiende, ha proseguido Espadas, el PSOE, frente al de «la derecha por más golpes de pecho que se dé hablando» del país o «más pulseritas» que muestren sus dirigentes. Se ha opuesto de este modo a una estrategia, en la que ha encuadrado al PP, que lleva a la «ruptura» o a «las calles incendiadas de 2017», en referencia a los efectos del referéndum ilegal en Cataluña.
Así se ha pronunciado, después de que este pasado viernes en Barcelona acusara, en el marco de una reunión con el líder del PSC, Salvador Illa, al presidente de la Junta, Juanma Moreno, de generar confrontación yendo a la manifestación de este domingo en la capital catalana convocada por SCC contra la amnistía y la autodeterminación. Lo ha hecho en el acto público que ha protagonizado Pedro Sánchez en Granada, junto con la diputada en Cortes por el PSOE y exvicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, y el secretario provincial de la formación, Pepe Entrena.
Juan Espadas, además, ha asegurado que Sánchez cuenta con el «respaldo» de todos los socialistas «sin fisuras», ha afirmado que «la derecha quiere imponer una España que históricamente ha sido, no la que quieren los españoles, la derecha en estado puro», por eso «los españoles dijeron no y eligieron al único con valentía y ambición para ser capaz de dar pasos los que había que dar».