Descubrimientos Arqueológicos en la Necrópolis Tartésica de Medellín
Las recientes excavaciones arqueológicas llevadas a cabo por la Junta de Extremadura en la necrópolis tartésica de Medellín han revelado hallazgos significativos. Entre los descubrimientos más destacados se encuentran fragmentos de cerámicas griegas de barniz negro, que han sido datados a finales del siglo V a. C. Estos fragmentos, que en campañas anteriores habían aparecido de manera descontextualizada, ahora se han documentado en un contexto arqueológico más claro, proporcionando una nueva perspectiva sobre su origen y uso.
Visita Oficial y Avances en el Proyecto
El pasado lunes, la directora general de Bibliotecas, Archivos y Patrimonio Cultural, Adela Rueda, realizó una visita al yacimiento para evaluar el progreso de los trabajos. Este proyecto cuenta con una inversión significativa de 245.000 euros y se desarrolla en el marco de un convenio entre la Junta de Extremadura, la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes, y el Ayuntamiento de Medellín.
Durante su visita, Rueda destacó que, aunque todavía es prematuro realizar una valoración definitiva de los hallazgos, la aparición de estas piezas confirma el contacto entre el mundo tartésico y las rutas comerciales del Mediterráneo. Esto refuerza la importancia de Medellín como un enclave arqueológico de referencia en la protohistoria de la península ibérica.
Plan de Excavaciones y Futuro del Proyecto
El proyecto, que se extenderá hasta el año 2028, contempla una serie de actividades que incluyen excavaciones en nuevas áreas de la necrópolis, prospecciones, sondeos geofísicos, y la restauración de materiales arqueológicos. Además, se planea la creación de una exposición monográfica que difundirá los resultados obtenidos, permitiendo así un mayor acceso del público a estos descubrimientos.
Importancia Cultural y Arqueológica
La necrópolis de Medellín, declarada Bien de Interés Cultural en 2014, fue excavada por primera vez en la década de 1980. Desde entonces, ha continuado proporcionando información esencial para comprender las comunidades tartésicas que se asentaron en el valle medio del Guadiana. Estos nuevos hallazgos no solo enriquecen nuestro conocimiento sobre estas antiguas civilizaciones, sino que también subrayan la importancia de Medellín como un sitio de investigación arqueológica continua y relevante.




