Hoy martes 30 de julio, una mujer de 79 años perteneciente al Área de Salud de Plasencia, ha fallecido a consecuencia de un golpe de calor provocado por las altas temperaturas que está viviendo la región en estos días.
Este fallecimiento se suma al conocido ayer lunes 29 de julio de un hombre de 77 años por las mismas circunstancias, en este caso en el Área de Salud de Badajoz. Por ello, desde el Servicio Extremeño de Salud (SES) se recuerda a la población que la exposición a temperaturas excesivas puede provocar problemas de salud.
Entre los síntomas de un golpe de calor se encuentran calambres, deshidratación e insolación, que pueden agravarse con problemas multiorgánicos que pueden incluir síntomas como inestabilidad en la marcha, convulsiones e incluso coma.
Desde el SES piden extremar las precauciones y actuar al notar otros síntomas como piel roja caliente y seca; falta de transpiración; respiración y frecuencia cardiaca acelerada; dolor palpitante de cabeza y alteración del estado mental y del comportamiento como vértigos, mareos, desorientación, delirios, confusión o pérdida de conocimiento.
Las personas mayores y los menores son más sensibles a los cambios de temperatura y en las personas con determinadas enfermedades crónicas, sometidas a tratamientos médicos o con discapacidades que limitan su autonomía, los mecanismos de termorregulación pueden verse descompensados, ha informado la Junta en nota de prensa.
La población especialmente susceptible ante situaciones de calor excesivas son, entre otros, los mayores de 65 años, los menores de 4 años, las embarazadas, las personas con enfermedades crónicas, con trastornos de la memoria y las que reciben ciertos tratamientos como diuréticos, neurolépticos, anticolinérgicos y tranquilizantes.
Desde el SES se aconseja a la ciudadanía evitar la exposición al sol en las horas centrales del día; beber abundantes líquidos, sobre todo agua y zumos de fruta refrigerados, sin esperar a tener sed; evitar comidas copiosas y no abusar de bebidas alcohólicas.




