La VI Bienal Mario Vargas Llosa se Traslada a Extremadura
La VI Bienal Mario Vargas Llosa se llevará a cabo en Extremadura, marcando un hito al ser la primera vez que este destacado evento literario se organiza en España. Anteriormente, la bienal se había celebrado en Perú y México. Álvaro Vargas Llosa, hijo del renombrado Nobel de Literatura, expresó su satisfacción por la elección de esta región, destacando los profundos lazos históricos que unen a su familia con Extremadura, ya que sus antepasados emigraron de allí hacia Perú en el siglo XVI.
Álvaro Vargas Llosa también compartió la conexión personal que su padre tenía con Extremadura, una región por la que sentía un «cariño muy, muy especial». El Nobel de Literatura visitó la región en diversas ocasiones, participando públicamente en eventos como el Festival de Teatro de Mérida y realizando visitas privadas para explorar áreas menos conocidas de su geografía.
El hijo del escritor afirmó que su padre «hubiera estado muy feliz» con la realización de la Bienal en Extremadura, añadiendo: «recuerdo mucho la emoción que tenía cada vez que llegaba a Extremadura». La familia, entusiasmada con la posibilidad, se movilizó rápidamente para hacer realidad el evento en la región.
Álvaro Vargas Llosa enfatizó que la Bienal aspira a ser un «hecho citadino -de toda la ciudad-» en Cáceres, una de las sedes junto a Badajoz y Trujillo. Subrayó la importancia de que «la cultura se vuelva algo accesible, algo muy horizontalmente difundido, que no se convierta en una cosa elitista y ajena a la experiencia de la gente». Esta perspectiva está en línea con el pensamiento de su padre, quien creía que «la cultura debía invadirlo todo».
Aunque esta es la primera edición sin la presencia física del autor, su hijo asegura que estará presente «de algún modo». El evento culminará con la entrega del premio a la mejor novela publicada en los últimos dos años. Álvaro Vargas Llosa comentó sobre la curiosidad que siempre caracterizó a su padre, diciendo: «Mi padre estoy seguro que está en algún lugar preguntándose quién ganará ese premio».
El espíritu de la Bienal, según explicó, es «muy abierto, muy libre y muy plural», una condición que siempre impuso el propio escritor. Este carácter se refleja en la combinación de autores consagrados con nuevos talentos, promoviendo así a las nuevas generaciones de valores en el campo de la literatura y la cultura en general.




